y vago por los campos teniendo por apoyo de los pastos maduros. Mi cabello asombroso
un gajo de algarrobo liso, fuerte y pulido esparce, al destrenzarlo, olor a sol y a heno,
que en sus ramas sostuvo la dulzura de un nido. a savia, a yerbabuena y a flores de centeno.
Juana de Ibarbourou
Que linda, me encanta el agua clara. Besos.
ResponderEliminarEl poema, las fotos y esa uña roja. Me gusta todo.
ResponderEliminarBesos
Preciosas fotos ( como siempre) y preciso el poema !
ResponderEliminarAy... cómo me habla esa mano, de su dueña...(es tuya)? Ya te diré todo lo que me dice, si me contestas...
ResponderEliminar;)
BELLAS IMAGENES, pureza que brota de esa transparencia deliciosa del agua; exquisita!
TE FELICITO,AMIGA HERMOSA.
MIL BESOS Y ABRAZOS!
Ah! Y el poema bellísimo! Sobretodo, para mi, la segunda pàrte; pasionalmente seductora...
ResponderEliminarBESOS NUEVOS!.
¡Qué sensación tan agradable transmites!
ResponderEliminarAbrazos.
Yo digo como Isabel, que transmites esa agradable y fresca sensación del agua clara entre las manos ¡preciosa imagen! ¿es tu mano? pues gracias por dárnosla, es un gesto muy hermoso.
ResponderEliminarMil besos, poeta visual :)
Bonitas y refrescantess fotos. Un abrazo
ResponderEliminarSimplemente agua... Vida y belleza limpia y clara!!
ResponderEliminarGracias por tus ánimos:))
Un beso
Un placer tu imagen de hoy, me sumo al comentario de Montse, poeta visual.
ResponderEliminarAbraçada Maria Dolors